martes, 29 de marzo de 2016

Breve historia de BiblioFyL


Como la actual conducción de Izquierda al Frente se ha dedicado estos días a buscar excusas ante los problemas de funcionamiento de pedidos On Line y digitalización de apuntes, les dejamos acá un recorrido sobre todo el trabajo y las discusiones detrás de el acceso a los apuntes digitalizados.

Bibliofyl nació como un proyecto colectivo de estudiantes de nuestra facultad, que frente a la ausencia de respuestas institucionales que garantizaran el acceso a los materiales de estudio de manera gratuita, se organizaron para resolverlo. Ese proyecto creció al punto de convertirse en una biblioteca digital de más de 10.000 textos que ofrecía los materiales de casi todas las materias de todas las carreras que se estudian en la Facultad. Esto sólo fue posible gracias al trabajo de cientos de colaboradores anónimos, todos ellos y ellas estudiantes, que se organizaron para digitalizar y conseguir los materiales y subirlos a Internet, en épocas en que el campus virtual ni siquiera existía o era subutilizado (como lo sigue siendo en muchas materias). 

En el año 2009 este grupo de compañeros de Bibliofyl recibió una intimación legal por el trabajo que estaban haciendo de manera voluntaria y desinteresada para toda la comunidad de Filosofía y Letras. Esta intimación legal los acusaba de infringir la ley de propiedad intelectual 11.723, que prohíbe expresamente la reproducción de cualquier tipo y no contempla ningún tipo de excepción educativa.

A partir de allí, se produjeron muchas idas y venidas con el proyecto, incluyendo la disolución de la comunidad original que había tomado la tarea en sus manos. Finalmente, cuando desde La Juntada ganamos el centro en el año 2010, se decidió hacer un traspaso para garantizar que esta iniciativa quedara dentro del Centro.

Al año siguiente, compañeros de BiblioFyL se acercaron al Centro para diseñar el nuevo sistema de pedidos online, una herramienta que se diseñó en conjunto para acercar el sistema de fotocopias, como parte del mismo problema de facilitar acceso a los materiales de estudio, a más compañeros estudiantes que decidían no acercarse a las fotocopiadoras del centro, que eran más baratas, producto de la ineficiencia galopante con la que el PO había gestionado las fotocopiadoras durante toda su conducción. 

Ahora bien, creemos que el problema del acceso a los materiales de estudio no debería ser dejado a la resolución de los estudiantes, a la buena voluntad de un grupo de compañeros que se organiza para facilitarlo, o al CEFyL que entre sus funciones anexas tiene la desagradable tarea de gestionar un centro de fotocopiado, muy alejado de los problemas políticos que realmente debería abordar el Centro. 

El progresivo abandono de la responsabilidad del Estado en garantizar el derecho a la educación incluye también el abandono de la responsabilidad del Estado en garantizar también el acceso a los materiales de estudio. Desde el regreso de la democracia en 1983 que se naturalizó la idea de que los estudiantes tienen la fotocopiadora para hacerse cargo.

La solución en 1983 pasaba por mejorar las colecciones de las bibliotecas (y las condiciones edilicias), otorgar becas a quienes no pudieran comprarse los materiales de estudio, y otorgar facilidades para aquellos estudiantes que trabajaban y no podían acercarse a la biblioteca en los horarios actuales que maneja. Nada de esto ocurrió, como parte del abandono progresivo de las funciones de Estado en garantizar este derecho. La organización estudiantil emparchó la ausencia del estado.

En el año 2007, cuando empezó la BiblioFyL, el centro de estudiantes estaba atrasadísimo en las soluciones que estaba proveyendo para los estudiantes, con un sistema obsoleto de organización de la fotocopiadora. Fue este grupo de estudiantes los que tomaron de algún modo la vanguardia y se organizaron para tener todo el material digitalizado, gestionarlo, organizarlo, subirlo a Internet y disponibilizarlo. Esto, además, ayudaba exponencialmente a todos los compañeros que solicitaban becas de estudio, las cuales siempre fueron mayormente financiadas por el CEFyL y no por la Facultad.

Cuando en el año 2009 recibieron la intimación legal, la Facultad no se hizo cargo tampoco de acercar ninguna ayuda. Pero sí hizo muchas promesas: prometió un sistema integrado de gestión de bibliotecas (GPLIB) que costó más de 500.000 pesos entre el año 2009 y 2013 y que sin embargo jamás vio la luz. El por entonces decano Trinchero prometió la digitalización de “todas las bibliotecas” de la Facultad en Página/12 (http://www.pagina12.com.ar/diario/universidad/10-232896-2013-11-05.html), pero al día de hoy lo único que hay son unos pocos números históricos digitalizados (http://revistascientificas.filo.uba.ar/) y un repositorio institucional al que ni siquiera le sacaron el encabezado del software sobre el que está montado (http://repositorio.filo.uba.ar/xmlui/). En cualquier otra institución universitaria esto sería un papelón, pero en Filosofía y Letras siempre hay lugar para la magia. Sumado a esto, desde La Juntada, impulsamos el rechazo a la renovación de la firma del convenio que la gestión de la UBA tenía con CADRA. Con los cientos de miles de pesos anuales que la UBA le transfirió a CADRA durante algunos años, podríamos haber tenido decenas de bibliotecas digitales.

Lo que no existe, sin embargo, son soluciones mágicas. El trabajo de los compañeros de BiblioFyL, y el nuestro respectivamente en Pedidos Online, es un trabajo que merece reconocimiento, porque fue parte de una experiencia colectiva de organización para resolver un problema que hoy más que nunca sigue vigente: el acceso a los materiales de estudio. La ley 11.723 de propiedad intelectual no modificó ni una coma desde que los compañeros recibieron la intimación. El Estado y la Universidad no pusieron ni un peso para resolver el problema del acceso a los materiales de estudio, aunque sí pusieron mucha plata que no se vio reflejada en los resultados que se esperaban.



lunes, 28 de marzo de 2016

¿Qué son las juntas departamentales?

Compartimos un poco de información importante para entender cómo funciona nuestra Filo
En esta nueva oportunidad explicamos de qué se tratan las juntas departamentales


domingo, 6 de marzo de 2016

Horarios 1er cuatrimestre 2016


Del 7 al 11 de marzo son las inscripciones a materias, seminarios e idiomas mediante el sistema suiga

Compartimos los horarios de todas las carreras e idiomas.

(Atención: según el Departamento de Profesores que designa los horarios todos están sujetos a modificaciones)

Bibliotecología

Si tienen información acerca de algún horario que figure mal en los documentos que compartimos, no duden en avisarnos a nuestro fb (La Juntada de Filo) o nuestro mail (lajuntadadefilo@gmail.com), así lo modificamos. Gracias!