domingo, 5 de agosto de 2012

Nosotros también tenemos algo para decir


Respuesta de estudiantes no agrupados y de La Juntada en el CUD ante las discusiones mediáticas sobre el Sistema Penitenciario Federal
Como muchos se habrán enterado en estos días viendo la televisión, o por los diarios, se ha estado hablando bastante sobre los derechos de aquellas personas privadas de su libertad. Lamentablemente, no por un genuino interés en que haya un Sistema Penitenciario Federal que deje de lado efectivamente muchas de las herencias que arrastra desde la dictadura, sino a partir de un hecho fundamentalmente mediático.
Como estudiantes de nuestra facultad, que hemos estado participando a lo largo del último año de visitas, talleres y actividades en el Centro Universitario Devoto (CUD), pensamos que tenemos algo para decir al respecto. Consideramos que hay que responder al discurso, tan reproducido en estos días, que pretende señalar “que en las cárceles se entra por una puerta y se sale por la otra” o que los que están privados de su libertad no tienen porque acceder a derechos a salidas a actividades culturales, por ejemplo. Este discurso busca fijar en el imaginario social que estamos en una situación de inseguridad permanente para instalar salidas políticas absolutamente excluyentes. Estos sectores, son presos de su propio discurso al olvidar que la solución al problema de la “seguridad” no pasa por excluir más a los ya excluidos sino por tratar de crear las condiciones para que puedan desarrollarse plenamente como personas.
Así, como también, queremos señalar que la realidad de la población carcelaria es muy distinta a las cifras que se han difundido, que las torturas, las muertes y las violaciones a los derechos humanos continúan siendo responsabilidad de un Servicio Penitenciario Federal (SPF) heredero de prácticas nefastas que son necesarias erradicar de raíz. Hoy en día, es una mínima proporción de la población carcelaria la que accede al derecho al estudio y al trabajo. Lamentablemente hemos tenido ejemplos en estos años dónde la principal traba para que el trabajo y la educación, como herramientas de reinserción social, lleguen a las cárceles ha sido el mismo SPF. Basta como una muestra el ataque que ha sufrido el Centro Universitario Devoto en el año 2010.
Estamos seguros que muchos de los que han opinado estos días sobre la situación de las cárceles en nuestro país, pocas veces han pisado una de ellas, pocas veces han tratado de comprender sus complejidades y problemáticas. Tampoco, es que creemos en soluciones ya cerradas y acabadas, sino que está salida tendrá que surgir a partir de la discusión en las mismas unidades carcelarias. Discusiones, como por ejemplo, las que encaran los compañeros estudiantes del CUD proponiendo una nueva ley del sistema penitenciario que termine con su militarización.
Mientras tanto nosotros, pretendemos aportar nuestro pequeño grano de arena, esforzándonos y pensando cómo mantener con vida espacios como el CUD. Buscando cómo hacer que nuestros talleres y actividades nos sirvan a nosotros para aprender sobre esa realidad para nada simple como también a los internos para poder escaparle a la violencia cotidiana en la que están constantemente inmersos. 

No hay comentarios: